martes, 30 de julio de 2013

The tea time.


La hora del té.

    Todas las tradiciones son importantes. En todos los países hay tradiciones que han pasado de siglo a siglo, y que se han mantenido hasta hoy en pleno siglo XXI. No hay persona o turista que no se haya quedado encandilado con algo que ha salido en series de televisión o películas inglesas donde se llevaba a cabo la famosa tradición de la hora del té.
    A pesar de estar en extinción por la rapidez y los horarios de nuestra sociedad actual, la parte old-fashioned y añorada de la sociedad inglesa sigue manteniendo la tradicional hora del té, aunque tiene tendencia a ser en ocasiones especiales. Se siguen viendo señoronas bien vestidas y tiesas tomándose sus tés y siguiendo un protocolo digno de la corte. También, los pertenecientes a las clases trabajadoras, siguen teniendo el tic de ofrecerse una taza de té cuando las cosas se tuercen.
    El Té de las 5 o en su idioma original “Afternoon Tea” es parte de una tradición inglesa en las altas esferas de la monarquía, aunque los ciudadanos ingleses que siguen la tradición también toman su té a las 5 de la tarde todos los días, como parte de un ritual, acompañado por un “muffin”, para disfrutar de esta hora.
    Hoy en día, la hora del té se ha vuelto muy tradicional en las altas esferas y en la clase media, sobre todo de 3 a 5 donde se comparte con los compañeros o con la familia. Pero este té, que es acompañado con sándwiches o pastas, es prácticamente como un entremés entre el almuerzo y la cena.
    La tradición es también seguida por ciudadanos ingleses que no son de la monarquía o las clases altas, son ciudadanos comunes y corrientes que trabajan y se ganan la vida, pero también desean darse un respiro con la hora del té. A otros ciudadanos, les es imposible disfrutar de la hora del té, por sus respectivos trabajos.

Historia viva.

    Los ingleses siguen arrastrando parte de la tradición tetera que empezó en el siglo XVII.
    La importación del té a Gran Bretaña empezó en 1660, cuando la esposa del rey Carlos II, se aficionó a esa bebida y extendió su gusto al resto de la corte. A partir de ese momento empezó el comercio con Asia para importar al antiguo puerto de Londres los diferentes tipos de té que, almacenados en las "warehouses" situadas a orillas del rio -actualmente convertidos en lofts de primera clase- llegarían a todos los puntos de este país.
    En 1706, Thomas Twining comenzó a venderlo en el Tom’s Coffee House de Londres, donde se reunían integrantes de la realeza, aristócratas y terratenientes a tomar una bebida que sólo estaba al alcance de las clases más pudientes, su precio era altísimo.
    Las damas no tenían acceso al lugar, razón por la cual enviaban a sus criados a comprar la codiciada infusión. Hacia fines del siglo XVIII, Richard Twining permitió que esta bebida se convirtiera en una infusión accesible al gran público, tras lograr que la Corona eliminara los altos impuestos que lo gravaban.
    En la década de los cuarenta del siglo XIX, Anna-María Stanhope Russell, 7ª Duquesa de Bedford (1783-1857), transformó la costumbre de tomar el té que, habitualmente, se servía como simple bebida refrescante o caliente -dependiendo de la estación del año-, convirtiéndolo en el principal ingrediente de una merienda ligera de la tarde, el "Afternoon Tea", que se servía entre las tres y las cinco.
    En el Reino-Unido, durante esa época de apertura económica, de revolución industrial y de libre cambio, el ritmo de las comidas consumidas en el curso de la jornada dependía de diferentes factores culturales, económicos y sociales.
    La élite británica se ponía a la mesa una media de dos veces al día. El desayuno, tomado poco después del despertar, y la cena servida al principio del anochecer. La hora de esa comida siendo cada vez más tardía, se añadió lo que se conoce como "lunch" (luncheon) o almuerzo ligero para apaciguar la sensación de hambre entre esas dos principales comidas del día.
    El "afternoon tea time" británico es la merienda social de media tarde, en la que se ofrece una variedad de pequeños emparedados salados y pastelitos dulces que se sirven con un té (Darjeeling), a las 17 horas.
    Pero la Duquesa de Bedford, cuyas apetencias contrariaban a menudo las tardes, tomó la costumbre de hacerse servir un surtido de emparedados o "sandwiches" y pastelerías acompañadas con una taza de té. Una especie de merienda que le permitía contener su necesidad de saciarse y poder esperar hasta la cena de la noche.
    Fue ella quien invitó a sus amigas a unirse a sus meriendas diarias, sentando el origen de las "Tea Party" organizadas en la corte inglesa.
    Con la aprobación de la reina Victoria, el "Afternoon Tea" adquirió rápidamente gran auge en el seno de la alta sociedad británica. Desde los salones de la aristocracia, esa práctica pasó a generalizarse en los de la encopetada burguesía extendiéndose luego hasta la clase obrera, marcando fundamentalmente las costumbres alimenticias de los ingleses.
    Con el paso de los siglos, ese ritual del té de la tarde se ha desarrollado progresivamente como una golosa tradición, implicando algunas convenciones sociales de buenas maneras y de saber estar en las reuniones.
    De esta forma, el té se convirtió en la bebida más popular en Gran Bretaña y comenzó la gran expansión mundial de la marca Twinings. Pero mucho tiempo antes había nacido la costumbre en China, cuna del té, no solamente porque cuenta la leyenda que fue aquí donde el emperador Shen-Nung descubrió sus virtudes, sino porque proporciona una gran cantidad de tés al mundo.

La saludable hora del té.

    El té es la bebida más popular del planeta, ya que alcanza diariamente la cifra de 2.5 billones de tazas alrededor del mundo, todo gracias a la tradición. Algunas de sus variedades proporcionan frescura e hidratación, así como una sensación de bienestar, y son benéficas para la salud.
    Beber una taza de buen té es toda una experiencia, su sabor es capaz de evocar recuerdos y hacer que broten historias sobre su larga tradición en naciones de Oriente y Occidente. Es bueno para la salud y puede beberse caliente o frío y, a pesar de que popularmente se habla de la hora del té, puede consumirse en cualquier momento.
    Es considerado como una bebida de reyes, sobre todo por la tradición que representa en Reino Unido, pero más allá —los especialistas de la casa Twinings— dicen que “ofrece al organismo una infinidad de alternativas, propiedades relajantes, antioxidantes y reconstituyentes, además de su inigualable sabor...”.
    No es necesario ser un experto para degustar el té, pero no está de más atender a los expertos y saber que existen cuatro tipos principales: blanco, verde, oolong y negro, a los cuales se suman múltiples variedades de cada categoría, por lo que hay más de 3 mil tés en el mundo, resultado de las diferencias climáticas, regiones y condiciones de suelo donde se cultiva la planta Camelia sinensis.
    Entre los selectos productos de Twinings se cuentan el negro, del que surge una gama de tés que contienen cafeína, entre ellos están el desayuno inglés, clásico de la familia, el earl grey, que mezclan diversas hojas orientales e ideales para las mañanas; el príncipe de gales, mezcla los más finos de China y la selección de tés negros, combinación de los anteriores.
    En el campo del té negro saborizado se encuentran los tipos de ceylán aromatizado, negro aromatizado, negro sabor naranja y canela, y el estilo indian chai.

Tipos de té.

    Los hay de mañana y de tarde: Breakfast teas y Afternoon teas. Los breakfast teas más destacados son, por supuesto el English Breakfast tea y el Assam
    El English Breakfast es un té negro, que generalmente mezclado con leche y azúcar, ofrece un gran cuerpo y sabor robusto.
    El Assam tea, con nombre homónimo a su lugar de producción en India, es un té negro que crece a nivel del mar, lo cual le da un sabor fuerte y un color brillante.
    Los Afternoon teas son el Earl Grey, Darjeeling y Ceylon.
    El Earl Grey tea se distingue por su sabor a bergamota y a cítricos. 
    Darjeeling tea es el te perteneciente a la región con ese mismo nombre en India. Quizás es el té con más reputación entre los demás tés negros, es ligero de cuerpo y con aroma floral. 
    Ceylon es otro tipo de té negro proveniente de Sri Lanka (país conocido como Ceylon anteriormente). Es un té de grandes aromas cítricos. Si quieres disfrutar de un buen te, paséate por los miles coffee shops que inundan esta ciudad.
    Para los que quieran investigar en más profundidad los tipos de tés y cafés y su historia, acércate el Brahmah tea and Coffee Museum y degusta los más exquisitos y exóticos tipos de te acompañados por bandejas de hasta tres pisos repletas de pastelitos o sandwiches.

Oriente puro.

    Twinings, que vende en el mundo más de 3 millones de sobres con su sello al año, ofrece “las delicadezas del verde, entre las que se mencionan de jazmín verde, que proporciona frescura e hidratación, así como una sensación de bienestar, y es altamente benéfico para la salud”.
    La selección del verde contiene exquisitas combinaciones que “ofrecen una sensación de rejuvenecimiento a los degustantes”.
    Esta casa de gran tradición menciona que entre las ricas infusiones hay de durazno y fruta de la pasión, para entrar en calma y relajación; fresa y mango, refrescante y sin cafeína; manzanilla con miel y vainilla, de propiedades relajantes; manzanilla con menta, recomendado para consumirse después de una copiosa comida o antes de dormir; y la selección de infusiones, para tomarse a cualquier hora del día.

Una tradición Británica muy Francesa.

    Es, en cualquier caso, interesante hacer hincapié sobre esta tradición reinventada por la Duquesa de Bedford; y digo reinventada porque la gran dama no hizo otra cosa que "revivir" -por muy curioso que resulte al lector-, una costumbre que imperaba entonces en los aristocráticos salones de Francia en el curso del siglo XVIII: la de ofrecer una merienda a los invitados con té, chocolate o café, amenizada con tertulias político-filosóficas y conciertos de cámara. Esa tradición salonnière francesa (que también se exportó a Rusia) se interrumpió bruscamente en 1789, año del estallido revolucionario, y no se reintroduciría hasta mediados del siglo XIX para ¡"imitar" a los británicos!
    Famosa es la prueba gráfica de este hecho innegable: el cuadro dieciochesco titulado "El Té a la inglesa en el Salón de los Cuatro-Espejos", en el que aparece, en medio de tan egregia compañía, un niño precoz llamado Wolfgang Amadeus Mozart tocando el clavicémbalo para amenizar un evento social semanal. El cuadro fue ejecutado por Michel Barthélé my Ollivier, pintor ordinario del Príncipe de Conti, en 1766, para reproducir ese momento especial en el que el talentoso y jovencísimo Mozart había sido invitado por el príncipe a tocar en su residencia parisina del Palacio del Temple.

Consejos:

    La moda de los últimos años en Londres es ir a tomar el té en alguno de los muchos hoteles de lujo. La experiencia es todo un ritual y además del té y de los delicados dulces que le acompañan, puedes pasar un rato elegante y sofisticado al sonido de un virtuoso pianista.
    El ritual del té se celebra en muchos hoteles y restaurantes de lujo de la ciudad. Nosotros recomendamos los siguientes:
    
    Hotel Claridge's (Brook St. - Metro Bond Street) - Todo un clásico en la ciudad, con un lujo y refinamiento dificilmente superables. Por unas 30 libras por persona (algo más si hay champagne) puedes vivir toda una experiencia inglesa amenizada por acordes de arpa, rodeado de la gente guapa de la ciudad y con suerte de algún famoso.
Vestimenta: Smart Casual (o sea arreglado pero informal), aunque la chaqueta y la corbata no desentonan. Nada de vaqueros o zapatillas.

    The Ritz (150 Piccadilly - Metro Green Park) - Servicio impecable y lujo absoluto. El Ritz es lo máximo que puedes esperar en tu experiencia tetera londinense. Cuesta casi 40 libras por persona, así que ponte tu  mejor chaqueta y corbata si eres hombre o tu mejor vestido si eres mujer y déjate llevar.
    
    The Savoy (Strand - Metro Charing Cross) - Otra experiencia refinada cuidada al más mínimo detalle, en el marco de unos de los hoteles más elegantes de la ciudad. Una de las mejores selecciones de Té de la ciudad y sin duda los mejores aperitivos. Vestimenta: Smart Casual. Precio en torno a las 30 libras.



Fuentes: (infolondres.com, viajalo.es, retratosdelahistoria.blogspot.com, mejoresarticulos.com)

2 comentarios:

  1. bonita historia esta del te de las cinco, pero los juegos de te q has puesto me encantan!!!!un besazo guapeton!!!!!!!!!!!!!!

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    1. Pues deja que los vea Elenita, lo va a flipar.

      ¡Un besote enorme!

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